En los últimos años la ciudadanía experimenta el incremento del desorden público durante las actividades de antorchas en septiembre para celebrar la Independencia.

Por Jimena Porres
Las antorchas de independencia son una tradición para las fiestas patrias en septiembre. Sin embargo en la última década otro hábito cobró popularidad entre los asistentes: lanzar bolsitas de agua a los corredores. Para la pedagoga social, Leslie Sequeira, surgió como una idea individual que fue propagada a nivel nacional.
Como una persona que corre maratones, Sequeira, reconoció que las bolsitas de agua eran herramientas útiles para refrescarse. Pero que esto que hacen es una distorsión de esta práctica. “Son batallas campales de tirarse agua”, describió. Ya no solo afecta a los corredores, también a peatones y conductores de vehículos y motocicletas.
La cultura de impunidad está impregnada en este tipo de acciones. “El desorden es el común denominador de muchas cosas que pasan en este país”. Pero el contexto genera sobresaltos por la magnitud mediática de la celebración.
Jeanne Samayoa, co fundadora de HaciendoEco, tachó la incorporación de esta actividad como problemática. “Es agresiva y fomenta la contaminación”. Además que causa caos vial e inseguridad entre los transeúntes.
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Los protocolos
Dos gobernaciones departamentales postearon publicaciones en redes sociales para desincentivar la práctica. Huehuetenango comenzó desde el 8 de septiembre, invitaron a la población a celebrar sin ensuciar con bolsas de agua. Mientras que Guatemala inició el 11 de septiembre a concientizar sobre el tema.
A pesar de esto, la Plaza Obelisco terminó inundada de bolsas plásticas dejadas por los participantes. Muchas personas expresaron en redes sociales haber sufrido percances con vehículos llenos de personas que les lanzaban estos objetos.
Según Amilcar Montejo, vocero de la Policía Municipal de Tránsito (PMT), ellos reciben información y coordinan apoyos. “Asignamos personal y distribuimos señalización”. Dijo que también existen esfuerzos interinstitucionales porque no afectar únicamente la movilidad. “También requiere de seguridad y coordinación intermunicipal”. Muchas antorchas entran y salen de la ciudad para dirigirse a otras alcaldías.
Recalcó que cuentan con un protocolo para que las personas avisen sobre cada actividad. La PMT asigna 800 agentes distribuidos en tres turnos. “Varios son asignados a hechos especiales de la ciudad, antorchas, desfiles y otras actividades cívicas”.
La Empresa Municipal de Tránsito de la Ciudad de Guatemala (Emetra), recibe algunas solicitudes de forma directa. Otras son enviadas por la gobernación departamental y el resto ingresan por medio de alcaldías auxiliares. “Estamos informados sobre todas las actividades que realizan y así agilizamos el tránsito”, explicó Montejo.
Jorge Mario García Rodríguez es el alcalde auxiliar de zona 18 de ciudad de Guatemala.
Las soluciones
Para Samayoa parte del problema es que las autoridades no organizan los eventos previos a su realización. “Lo que vemos en Plaza Obelisco es anarquía y una negligencia gigante”. Lo primero que debería de asumir un rol es la educación. “Hay que empezar a resignificar las fiestas patrias”. “No hay educación vial, educación ambiental, respeto, ni planificación. Realmente es preocupante el camino que han tomado las antorchas en Guatemala”.
El fomento del uso de envases reutilizables y concientizar acerca del uso de plásticos de un solo uso en estas actividades. “Un país no existe solo, somos nuestra historia y nuestra historia es compartida”.
Para vivir en colectividad es necesario tener reglas que sean respetadas para el beneficio general. Tanto las municipalidades como el Ministerio de Ambiente y el Ministerio de Educación tienen un rol importante para que la celebración no caiga en caos, observó Samayoa.
Mientras que Sequeira sugiere medidas más fuertes que incluye la prohibición explícita de esta práctica. “Ya lo vimos con el tema de ponernos el cinturón”, recordó. “Son pequeñas cuñas que se pueden racionalizar sobre los efectos negativos de ciertas formas de hacer las cosas”.
La gobernación departamental de Guatemala realizó un llamado para que en los próximos años la celebración deje atrás esta costumbre. Reafirmó su compromiso de trabajar con otros ministerios y secretarías para poner en marcha campañas de concientización.
Montejo, por su parte, dijo que el rol de la PMT es más preventivo. “Verificamos que no dañaran las tuberías de agua ni el mobiliario presente”. En caso de agresiones, insultos y daños a la propiedad privada, ya coordinan con la Policía Nacional Civil (PNC). Reconoció que fuera de la Plaza Obelisco hubo diversos heridos por personas que tiraron pedazos de hielo. Sin embargo, esas investigaciones quedan en manos de la PNC.
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